Enseñar, aprender y evaluar son tres procesos inseparables que deben ser coherentes, o de lo contrario, producen efectos contradictorios en la formación del alumnado. Por lo anterior, se necesita de la vinculación, pues los cambios en uno, repercuten de inmediato en el otro proceso.
Ante esto, la RIEB ha construido un enfoque de evaluación que ofrece al profesor una perspectiva particular. Puesto que la evaluación se considera de suma importancia, para evaluar tenemos que enseñar, pues se evalúa lo que se enseña, este proceso, llamado evaluación ha sufrido evoluciones a lo largo del tiempo, hace décadas, se vinculaba únicamente al examen por medio del cual un alumno obtenía alguna calificación; hoy podemos reconocer la importancia de considerar la evaluación como un proceso formativo y reconocerla como un apoyo para la retroalimentación.
Por lo anterior, en las siguientes líneas, se conceptualizará el tipo de evaluación a utilizar, sus características, así como una descripción de los instrumentos que se implementarán, así como su funcionalidad, todo lo anterior vinculado al desarrollo de una inclusión efectiva en el momento formativo de preescolar, del CAM Jáltipan.