Una de las grandes preocupaciones de las Instituciones de Educación Superior, es la formación de recursos humanos en la investigación, se promueven programas de aliento a la investigación, como por ejemplo el verano científico, donde los estudiantes se incorporan a proyectos de investigación de reconocidos investigadores, con ello, se pretende que aprenda a investigar, esta acción abona a la afirmación de que se enseña a investigar investigando, premisa que tiene aceptación entre los profesores-investigadores, otros profesores asumen que de igual forma en las aulas se enseña a investigar, es ahí en el espacio del aula donde se pueden generar las primera aproximaciones metodológicas entre los estudiantes.
Sin embargo, es importante que los que enseñan a investigar dentro o fuera del aula, consideren una tarea previa: enseñar a pensar en una idea de investigación, la investigación y el pensamiento como dualidad, son fuente de creación de una idea para ser investigada; lo anterior recobra fuerza cuando reconocemos que tan importante es enseñar a investigar a los estudiantes universitarios, lo que implica entonces que alguien debe hacer esa tarea primordial.
En las aulas quien enseña a investigar es el docente responsable de aquellas asignaturas que, desde el currículo, marcan esa encomienda, hecho que parece oponerse a la premisa mencionada con anterioridad: se enseñanza a investigar investigando. La incertidumbre que provoca el encuentro entre docente-experto y aprendiz-novato en el aula para enseñar y aprender a investigar es una de las discusiones que permiten reflexionar que…si bien existen argumentos de que se enseña a investigar investigando, es igual de válido considerar que enseñar a pensar una idea para investigar y elevarla a la categoría de problema, se puede hacer desde el aula.
Una estrategia para enseñar y aprender a investigar pueden ser los estados del arte, el aprendiz-novato al estar frente a frente con las ideas de otros, que ante su mirada son investigadores-expertos, cabe la posibilidad de que active su pensamiento, viva la incertidumbre para definirlo y recurra a la experiencia que tiene como referente para hacer investigación. Pensar una idea es una tarea que debe colocarse en el centro de quien enseña a investigar en el aula, el ejercicio metodológico que sugiere el estado del arte, es una alternativa para que los estudiantes definan y den claridad a la idea inicial de su investigación.