Resumen
Revertir la transmisión intergeneracional de la pobreza implica enfrentarse a problemas como la desigualdad en la distribución de ingresos, así como aumentar los niveles de inclusión y sentido de pertenencia de las personas. Hoy en día resulta obvio, casi indiscutible, el potencial de la educación como instrumento de lucha contra la pobreza y, en definitiva, para promover el desarrollo con equidad. Esta idea forma parte de los discursos oficiales referidos a la educación, en especial de aquellos que hacen referencia a la lucha contra la desigualdad social. Son muchos los argumentos que demuestran que la Educación Inicial puede compensar la pertenencia a un medio familiar y comunitario poco favorable contribuyendo a disminuir las desigualdades sociales. Nosotros los hemos resumido en ocho puntos principales que detallaremos en esta presentación.
Es Doctora en Educación y Máster en Investigación en Educación por la Universidad Autónoma de Barcelona y Licenciada en Psicología por la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla. Desde 2009 forma parte del Grupo Interdisciplinar en Políticas Educativas de la Universidad Autónoma de Barcelona y la Universidad de Barcelona, España. Forma parte del Comité Científico de ‘Pedagogía Social, Revista Interuniversitaria’ de España y de la revista ‘Graffylia’ de la Facultad de Filosofía y Letras de la BUAP. Es revisora externa de ‘Pedagogy Theory & Practice’ y de la ‘Revista Internacional de Educación y Aprendizaje’. Pertenece al Sistema Nacional de Investigadores del CONACYT y es líder del Cuerpo Académico ‘Pedagogía Social y Orientación Educativa’. Sus principales líneas de investigación son: políticas educativas, pedagogía social y primera infancia. Actualmente es profesora-investigadora de la Licenciatura en Procesos Educativos y del Doctorado en Investigación e Innovación Educativa, de la Facultad de Filosofía y Letras de la BUAP.