Resumen
Actualmente, en el campo de la docencia se da mucha importancia a las diferentes reformas que han surgido desde la década de los 80’s con la finalidad de aumentar la calidad educativa, pero en escasas ocasiones reflexionamos lo que pasa en las aulas, lo que tú docente estas realizando; no pensamos en el significado que otorgamos al ser docente, cómo lo vivimos y qué sentido damos a nuestra práctica. Por ello, esta investigación parte de los siguientes cuestionamientos, ¿La manera en que se vive la docencia en la cotidianidad está vinculada a la existencia o no de un proyecto? En función de esto ¿Cómo es que las educadoras viven el ser docente? ¿Ser educadora es visto como un medio de vida lejos de ser un proyecto de vida?
Hablar de proyecto no refiere a la organización futura de actividades o a establecer lo que deseamos obtener materialmente a lo largo de nuestra vida, si no que se refiere a lo que Heidegger (1927), define como un proceso de construcción de nosotros mismos, un encuentro con nuestro “ser ahí”, al que él denomina como “Este ente que somos en cada caso nosotros mismos y que tiene entre otros rasgos la posibilidad de ser, del preguntar” (Heidegger,1927 p. 17). Es decir, el ser ahí somos nosotros, quienes tenemos la posibilidad de cuestionar nuestra propia existencia y el mundo que nos rodea, y a partir de ahí construirnos para llegar a ser un sí mismo propio, auténtico, con apertura a crear y construir un proyecto abierto, no cerrándonos a reproducir lo cotidiano, lo ya aceptado por la sociedad.
Las educadoras desempeñan una función importante dentro de la educación, pero debemos tener claridad de que también son seres humanos capaces de cuestionarse y transformar su labor educativa con la posibilidad de recuperar la formación de sí mismas. Es así, que el proyecto de vida cobra gran importancia pues los docentes son seres capaces de decidir sobre un proyecto que responde a su vocación personal, valorando aquello que le resulta valioso realizar, otorgándole un sentido a su existir para así realizarlo de manera ética y sentirse plenos realizados y felices.
Es así como la primera parte de esta ponencia desarrolla el posicionamiento teórico que guía el trabajo, el segundo momento plantea la estrategia metodológica y por último presenta los hallazgos del acercamiento empírico.
Palabras clave:
Proyecto, formación, ética