Resumen

La educación para la salud es una práctica antigua, aunque ha variado sustancialmente en cuanto a su enfoque ideológico y metodológico como consecuencia de los cambios paradigmáticos en relación a la salud, se ha trasformado de un concepto de salud como no-enfermedad hacia otro más global, que considera la salud como la globalidad dinámica de bienestar físico, psíquico y social.

El paso del concepto negativo de la salud a una visión positiva ha conducido a un movimiento ideológico, en el cual las acciones deben ir dirigidas a fomentar estilos de vida sanos, frente al enfoque preventivo que había prevalecido hasta hace algunos años.

Esta disciplina puede considerarse desde dos perspectivas: preventiva y de promoción de la salud. Desde el punto de vista preventivo, preparando a sujetos capaces de trasmitir información y guiar a la población para evitar los problemas de salud mediante el propio control de las situaciones de riesgo que les rodean y desde una perspectiva de promoción de la salud, desarrollando capacidades y habilidades en los Licenciados en Educación para la Salud que les permita promover ante la diversidad poblacional la adopción de estilos de vida saludables.

A raíz de esto las prácticas que se realizan durante la formación académica de los estudiantes han favorecido para que los estilos de vida de la sociedad se modifiquen y mejoren su calidad de vida.

Por ello, una de las experiencias que han tenido los estudiantes de la Licenciatura en Educación para la Salud ha sido en una Secundaria de la Zona Oriente del estado de México. Esta práctica fue realizada en un periodo de febrero a mayo de 2014. Para lograr realizar dichas actividades se debe llevo a cabo un proceso metodológico que inicia con el estudio sociocomunitario de la sociedad, la planeación, implementación y evaluación de los resultados obtenidos durante su implementación.