Las uni­ver­si­da­des públi­cas fre­na­ron su cre­ci­mien­to des­de 1976, por lo que cada año aumen­ta el núme­ro de jóve­nes que desean con­ti­nuar estu­dian­do y son lite­ral­men­te “recha­za­dos”, moti­van­do su frus­tra­ción y deses­pe­ra­ción, pues son pocos los que pue­den tener acce­so a las uni­ver­si­da­des pri­va­das que corre­la­ti­va­men­te han pro­li­fe­ra­do en las últi­mas décadas.

Los mode­los edu­ca­ti­vos por “com­pe­ten­cias” que se pre­ten­den impo­ner a todos los nive­les edu­ca­ti­vos están orien­ta­dos a crear “emplea­dos” que com­pi­tan entre sí por los esca­sos y exi­gen­tes pues­tos de tra­ba­jo que ofre­cen las empre­sas cada vez más trans­na­cio­na­les. Cada vez se le da menos impor­tan­cia a las huma­ni­da­des, a la filo­so­fía, a la inven­ti­va tec­no­ló­gi­ca, a las artes y a los depor­tes. Talen­tos como los de los jóve­nes del Ins­ti­tu­to Poli­téc­ni­co Nacio­nal que han gana­do los pri­me­ros luga­res del mun­do en robó­ti­ca no han sido valo­ra­dos ni pro­yec­ta­dos mínimamente.

Al menos des­de 1982 y has­ta la fecha, quie­nes han esta­do como res­pon­sa­bles de la edu­ca­ción nacio­nal no cuen­tan en su tra­yec­to­ria con pen­sa­mien­to, obra o expe­rien­cia edu­ca­ti­va des­ta­ca­da antes de ser nom­bra­dos como Secre­ta­rios de Edu­ca­ción Públi­ca. La gran mayo­ría de ellos no se habían ocu­pa­do de mane­ra prio­ri­ta­ria del tema edu­ca­ti­vo antes de su nom­bra­mien­to y han dura­do un pro­me­dio de 3 años en el cargo.

La men­cio­na­da “Refor­ma Edu­ca­ti­va” 2013 se ape­ga a direc­tri­ces inter­na­cio­na­les rela­cio­na­das con el tema de la cali­dad edu­ca­ti­va que equi­vo­ca­da­men­te supo­nen que la eva­lua­ción estan­da­ri­za­da de docen­tes y estu­dian­tes es el ele­men­to fun­da­men­tal para mejo­rar dicha cali­dad, sin que haya evi­den­cia para ello y sin un pro­yec­to peda­gó­gi­co y edu­ca­ti­vo que dé con­tex­to y sen­ti­do a dichas eva­lua­cio­nes. Una pseu­do eva­lua­ción así cons­ti­tu­ye sola­men­te un ins­tru­men­to de con­trol y dis­cri­mi­na­ción de quie­nes no se some­ten a la ideo­lo­gía del instrumento.

La “Refor­ma edu­ca­ti­va” 2013 hace recaer sobre los docen­tes la res­pon­sa­bi­li­dad total de la pro­ble­má­ti­ca edu­ca­ti­va, al cen­trar­se sobre la eva­lua­ción de los mis­mos, cues­tio­nan­do de entra­da su desem­pe­ño pro­fe­sio­nal y ame­na­zan­do su esta­bi­li­dad labo­ral, sin con­si­de­rar otros fac­to­res rele­van­tes: pla­nes y pro­gra­mas edu­ca­ti­vos; sis­te­ma de eva­lua­ción del apren­di­za­je; for­mas de orga­ni­za­ción y ges­tión esco­lar; infra­es­truc­tu­ra, recur­sos y mate­ria­les didác­ti­cos; entorno esco­lar; víncu­lo escue­la-comu­ni­dad; salud y nutri­ción de estu­dian­tes y docen­tes; con­di­cio­nes labo­ra­les y sala­ria­les; par­ti­ci­pa­ción de estu­dian­tes, docen­tes y padres de fami­lia en las deci­sio­nes edu­ca­ti­vas fundamentales.

El Con­se­jo Nacio­nal del Pue­blo Mexi­cano salu­da al movi­mien­to magis­te­rial enca­be­za­do por la Coor­di­na­do­ra Nacio­nal de Tra­ba­ja­do­res de la Edu­ca­ción (CNTE) y se soli­da­ri­za con él, así como apo­ya las pro­pues­tas y accio­nes rea­li­za­das por el Con­se­jo de Trans­for­ma­ción Edu­ca­ti­va (CTE), orga­ni­za­ción ciu­da­da­na inde­pen­dien­te, que pro­mue­ve la crea­ción y desa­rro­llo de ins­ti­tu­cio­nes edu­ca­ti­vas alter­na­ti­vas que res­pon­dan a las nece­si­da­des edu­ca­ti­vas de niños y jóve­nes en víncu­lo con sus comunidades.

El Con­se­jo Nacio­nal del Pue­blo Mexi­cano pro­po­ne un nue­vo pro­yec­to edu­ca­ti­vo inte­gral que valo­re la diver­si­dad de talen­tos, expe­rien­cias, tra­yec­to­rias y voca­cio­nes de docen­tes y estu­dian­tes para for­mu­lar pro­yec­tos y accio­nes de bene­fi­cio social. Debe dar­se prio­ri­dad al apren­di­za­je crea­dor y coope­ra­ti­vo y no al memo­rís­ti­co y com­pe­ti­ti­vo. Los niños y jóve­nes deben ser for­ma­dos para ser empre­sa­rios coope­ra­ti­vos y no “emplea­dos”. Una edu­ca­ción para la paz y la fra­ter­ni­dad. Es nece­sa­rio aca­bar con los exá­me­nes estan­da­ri­za­dos como ins­tru­men­to de eva­lua­ción para con­si­de­rar­los como un medio didác­ti­co más y hacer las eva­lua­cio­nes median­te retro­ali­men­ta­cio­nes sis­te­ma­ti­za­das entre gru­pos de pares den­tro de cada aula, inter-aulas, entre escue­las, entre muni­ci­pios, entre esta­dos y entre paí­ses diversos.

Por ello, el CNPM pretende:

Defen­der la edu­ca­ción  públi­ca, lai­ca, cien­tí­fi­ca y gra­tui­ta y pro­mo­ver la aper­tu­ra de pre­pa­ra­to­rias y uni­ver­si­da­des para todos. Cero recha­za­dos en edu­ca­ción media supe­rior y superior.

 Dise­ñar un mode­lo edu­ca­ti­vo que atien­da las nece­si­da­des del pue­blo, en lugar de ape­gar­se a mode­los impues­tos inter­na­cio­nal­men­te por la OCDE.

Impul­sar la trans­for­ma­ción de la edu­ca­ción para inte­grar la diver­si­dad de talen­tos de docen­tes y estu­dian­tes, median­te una edu­ca­ción basa­da en el diálogo.

Lograr que las escue­las sean cen­tros de acción social, encar­ga­das de impul­sar el desa­rro­llo cul­tu­ral, ambien­tal, eco­nó­mi­co y polí­ti­co de las comu­ni­da­des. El tra­ba­jo en las aulas de docen­tes y alum­nos debe con­cen­trar­se en pre­pa­rar pro­gra­mas de acción diri­gi­dos a las comunidades.

Esta­ble­cer como ejes del mode­lo peda­gó­gi­co el apren­di­za­je crea­dor y cooperativo.

Impul­sar la edu­ca­ción y la cul­tu­ra para eli­mi­nar la mar­gi­na­ción, la dis­cri­mi­na­ción y el divisionismo.

Lograr que las escue­las dejen de for­mar úni­ca­men­te para el “empleo” y for­mar a niños y jóve­nes como empre­sa­rios socia­les coope­ra­ti­vos, con alto sen­ti­do de comu­ni­dad, com­pro­me­ti­dos con el cui­da­do de la salud y el ambien­te, alta­men­te par­ti­ci­pa­ti­vos en la vida social y política.

Esta­ble­cer como prio­ri­da­des edu­ca­ti­vas: 1) Apren­der a expre­sar­se por escri­to; 2) Apren­der a orga­ni­zar­se, usar y desa­rro­llar tec­no­lo­gías, sin depen­der de nadie; 3) Apren­der a escu­char recep­ti­va­men­te otros pun­tos de vis­ta; 4) Apren­der a gene­rar y man­te­ner rela­cio­nes afec­ti­vas satis­fac­to­rias; 5) For­ma­ción del sen­ti­do éti­co, eco­ló­gi­co, comu­ni­ta­rio y alta­men­te par­ti­ci­pa­ti­vo; 6) Visión cós­mi­ca y ecosistémica.

Dero­gar la Refor­ma edu­ca­ti­va 2013, para desa­rro­llar y rea­li­zar un pro­yec­to edu­ca­ti­vo inte­gral que abar­que la regu­la­ción de los con­te­ni­dos de la tele­vi­sión para gene­rar pro­gra­ma­ción que fomen­te el apren­di­za­je y la cultura.

Defen­der y pro­mo­ver el pro­yec­to de escue­las nor­ma­lis­tas rura­les vin­cu­la­das al desa­rro­llo comu­ni­ta­rio, regio­nal y tecnológico.

Crear un víncu­lo entre la for­ma­ción téc­ni­ca y/o pro­fe­sio­nal y las comu­ni­da­des y cen­tros productivos.

Desa­rro­llar becas para el inter­cam­bio inter­na­cio­nal de los estu­dian­tes de pos­gra­dos y estu­dios pro­fe­sio­na­les, pro­mo­vien­do en Méxi­co las opcio­nes labo­ra­les ade­cua­das para su preparación.

Fuen­tes: Pro­cla­ma nacio­nal del CNPM y Pro­gra­ma del Con­se­jo Nacio­nal del Pue­blo Mexicano